Pautas Neuro-psicosomáticas 3

Neurociencia Aplicada al Desarrollo Humano



(III) Candado Ultradiano

(Adaptación de la técnica de Richard Landis, Ph.D.)



  1. Siéntese, párese o échese en una posición cómoda. Es importante, sin embargo, que su posición sea simétrica, o sea, que una parte de su cuerpo refleje a la otra como en un espejo. El propósito de ello es el de obtener un patrón similar de funcionamiento en ambos hemisferios del cerebro. Descanse los brazos sobre las piernas, o apóyelos a ambos lados del cuerpo con las palmas hacia abajo.


2.-

A. Apriete firmemente los dedos índice y medio contra el pulgar de su respectiva mano.


B. Manteniendo los dedos apretados, inhale profundamente por la nariz hasta sentir que la parte superior de su espalda se haya estirado.

C. Manteniendo los dedos apretados, exhale por la nariz, vaciando completamente los pulmones. Sienta a su pecho hundirse.

D. Repita esta operación 4 veces. Mantenga los dedos apretados durante todo el proceso.

E. Repita esta operación una vez más. Esta vez, al inhalar, mantenga su respiración y cuente lentamente hasta cinco.

F. Exhale, rápidamente y con fuerza, por la boca, metiendo el diafragma, mientras que, al mismo tiempo, suelta, de golpe, la presión que venía ejerciendo con los dedos.


Ahora, quizás notará a sus manos descansando cómodamente junto a su cuerpo. Es posible que exista una sensación de pesadez en las manos, sin embargo, ésta empezará a desvanecerse cuando levante y mueva los brazos. Si Ud. no nota esta sensación, o su cuerpo no está tan relajado como quisiera, espere 30 segundos, y repita otra serie de 5 respiraciones. Es rara la persona que requiere hacerlo más de tres o cuatro veces para obtener una sensación de relajamiento.

Repita este ejercicio unas 6 a 8 veces al día, e intégrelo a su rutina diaria.